Queridos/as compañeros/as y amigos/as,
Ha sido un año intensísimo. Nos hemos entregado a la tarea que nos propusimos personal y colectivamente con cuerpo y alma. Hemos abierto espacios, hemos pasado de etapas preparativas y reflexivas a ejecutivas, evaluativas y vuelta a accionar. Nos hemos regalado mutuamente nuestro tiempo, cariño, confianza, capacidades, ganas. Creo que nos merecemos un descanso (aunque para algunos de nosotros eso sea una quimera, algo difícil de aceptar porque queremos avanzar, avanzar es tanto lo que se puede hacer, es tanto lo que falta por crear, conquistar y construir)...
El poeta del grupo que trabaja con nosotros Camilo Brodsky, en un intercambio hace semanas me escribió que lo más importante es cuidar la felicidad, ser felices. Y en esa felicidad está también nuestro entorno más cercano, la familia, y para quienes estamos en esa, los/as hijos/as, el/la compañero/a. Lo que hemos hecho ha tenido su cuota graaaande de sacrificio en esta línea, y bien lo sabemos y sentimos varios/as de los que estamos en esta actividad de imaginar y hacer realidad una izquierda nueva, fresca, amplia, con logros verificables en el tiempo, que no se quede en la denuncia, sino que genere confianza en que con acción colectiva inteligente y sensible podemos transformar la realidad.
En mi caso personal, luchar forma parte de mi concepto de felicidad, desde que era un enano leyendo los Manuscritos Económico Filosóficos de Carlitos Marx, en una edición en que venía un bachillerato que jugó con sus hijas Jenny y Laura, que impresionó muchísimo. Pero ahora caigo en cuenta que esos conceptos que, gracias a la magia de los libros llegaron a nuestras manos contemporáneas, los esbozó jugando con sus hijas. Desde Mayo del año pasado, cuando nos tiramos a la Campaña, que el tiempo no ha alcanzado lo suficiente para esta dimensión de la vida, y es momento de recobrar ese tiempo perdido (puchas que ando cliché!!).
Así es que, "cinco minutos de interrupción, la charanga de Juan Barbero toca un son", con nuestro colectivo entramos a un receso de un par de semanas, bien merecidas, para recargar baterías, regalonear, reirse y pisarse los pies como canta Silvio en "De la ausencia y de tí" (no se preocupen, ya termino y no voy a concluir citando a Marc Anthony o Alex Ubago, que ese sí, me gusta... "Palomas blancas vuelan raso, sobre el tejado brilla el sol")...
Abrazos, me borro ahora con Karen y mis lunitas entre Tongoy y Los Vilos y no estaré diponble hasta el 15 de enero. Les deseo a todos quienes puedan no olvidar descansar y ser felices también de otros modos, como recomienda Brodsky, que se nos viene un 2009 movido, intenso, desafiante.
Los/as quiero por montones,
Manuel.
PD: El bachillerato que jugó Carlitos. Chau!
- Virtud favorita: La sencillez.
- Virtud favorita en el hombre: La fortaleza.
- Virtud favorita en la mujer: La ternura.
- Su rasgo principal: La unidad de propósito.
- Idea de la felicidad: Luchar.
- Idea de la desgracia: La sumisión.
- El vicio que más excusa: La credulidad.
- El vicio que más detesta: El servilismo.
- Aversión: Martin Tupper.
- Ocupación favorita: Ratón de biblioteca.
- Poeta favorito: Shakespeare, Esquilo, Goethe.
- Prosista favorito: Diderot.
- Héroe favorito: Espartaco, Kepler.
- Heroína favorita: Gretchen.
- Flor favorita: Dafne.
- Color favorito: Rojo.
- Nombre favorito: Laura, Jenny.
- Plato favorito: Pescado.
- Máxima favorita: Nihil humani a me alienum puto (Nada humano me es ajeno).
- Lema favorito: De omnibus dubitandum (De todo hay que dudar).
(Citado por Erich Fromm, en "Marx y su concepto del hombre.
Manuscritos Económico-Filosóficos", Fondo de Cultura Económica,
México, 1987, pág. 266).
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